
Prólogo.
…Si eres capaz de escalar los escalones (kaidan), gradualmente (dandan), ascenderás en la escala (dan), practica fielmente, gradualmente (dandan), realizaras tus sueños mas altos y mas grandes e iras gradualmente (dandan) ascendiendo.
Estas son las palabras de Sadago Kusaji, ex presidente del Japan Jyukendo Federation y ex director del Gunsanbo (Milicia local).Me gusta lo que escribió y leerlo tan seguido que me vino a la memoria.
Comencé a practicar Aikido en la primavera de 1954 y continué practicando por cincuenta años hasta ahora. Estoy muy agradecido con el segundo Doshu Kisshomaru Ueshiba de quien recibí mi octavo Dan.
Sin embargo, mi sentimiento es que aun trato de alcanzar el nivel espiritual de un octavo Dan. A través del estricto entrenamiento en el Hombu Dojo, y luego mi experiencia como instructor, finalmente pude construir mi dojo de 18 tatamis en mi casa en Kodaira en la primavera de 1969. Eran momentos de protesta contra la renovación del tratado de seguridad entre Japón y USA, entonces los alumnos de Meiji University y Saitama University, junto a alumnos de otras universidades, tenían las puertas cerradas, tantos estudiantes con problemas. Esto me preocupo, entonces el dojo se convirtió en un lugar donde los estudiantes y mi hijo de tres años pudieran practicar seriamente. Eso era Kobayashi Dojo. Treinta y seis años después, ese humilde dojo, bendecido por el tiempo, lugar y su circulo de personas, creció en lo que hoy son 136 dojos y lugares de practica bajo la tutela de Kobayashi Dojo, con instructores en mas de dieciocho países.
Yasuo Kobayashi